Esta mañana en el edificio de Chacabuco y Pedernera donde se aloja el espacio, se descubrió una placa de reconocimiento a la docente fallecida en el 2020. Adriana fue una ex estudiante, docente y profesional de esta Casa. Cumplió un rol fundamental en la formación de estudiantes y se destacó por su perfil extensionista y comprometido con la sociedad.
Por iniciativa de sus colegas de la Carrera, y con el apoyo del Departamento de Enfermería, desde el año 2022 se impulsó que el Laboratorio llevara el nombre Lic. Adriana Del Valle Baracco. El Consejo Directivo de la Unidad Académica mediante Resolución 81 del año 2024 aprobó lo solicitado apoyando la iniciativa y valorando la labor comprometida de la docente. El Consejo Superior, en su Resolución 261 del mismo año, aprobó con fecha 12 de noviembre este pedido.
Adriana fue una ex estudiante, docente y profesional de esta Casa, nos enorgulleció eternamente con su comprometida labor y al abandonarnos de manera prematura en el año 2020, dejó un enorme vacío entre quienes cada día compartían junto a ella, pero a la vez también dejó una huella imborrable en sus alumnos/as y compañeros/as de trabajo.
En su labor docente, cumplió un rol fundamental en la formación de estudiantes y se destacó por su perfil extensionista y comprometido con la sociedad. Además, tuvo una destacada presencia en la campaña de vacunación de la pandemia por Covid-19 y en otras innumerables actividades relacionadas a la prevención de enfermedades y promoción de la salud.
Luego del descubrimiento de la placa, se dirigió a las personas presentes la Profesora en Enfermería, Esp. Cecilia Miranda Suárez, quien dijo: «Adriana sigue presente, no nos vamos a olvidar de la sonrisa espontánea que tenía, su forma tan dulce de dirigirse (…) No me quiero olvidar de esa sonrisa que siempre tenía para todos, eso es lo único que quiero que todos recordemos, su nombre, quién fue y todo lo que sembró».
Por su parte, la decana de la Facultad, Esp. María Cecilia Camargo, expresó que se trata de un momento que conjuga emociones profundas, un día para recordar, honrar y celebrar la vida de quien formó parte de nuestra Institución en la disciplina de Enfermería. «Quienes tuvieron la oportunidad de trabajar y compartir con Adriana, dan fe que fue una colega excepcional, pero fundamentalmente una excelente persona, solidaria y generosa, siempre al servicio de los demás, con una dedicación incansable, apasionada por la enseñanza y comprometida con la formación de enfermeros y enfermeras».
Asimismo, resaltó que la placa que hoy se descubrió no es solo un objeto, es un símbolo de lo que Adriana representó para esta comunidad, un recordatorio de su sonrisa, de su capacidad para motivar, de su empatía, de su determinación por hacer del mundo un lugar mejor a través de la enfermería. «Este Laboratorio será un espacio vivo donde su espíritu continuará presente guiando a quienes se formen aquí. (…) Hoy al descubrir esta placa, su memoria seguirá siendo luz para quienes transiten este espacio. (…) Cuentan, quienes estuvieron alguna vez con Adriana, que se sintieron valorados, inspirados y profundamente humanos», destacó Camargo.
Por otra parte, el rector de la Institución, C.P.N. Víctor Moriñigo, sostuvo que fue acertada la decisión de la Facultad de inmortalizar su nombre en el Laboratorio. «Hoy habrá dos (2) lugares en donde jamás se va a borrar su nombre, uno de ellos es el corazón de quienes la quieren y otro, es un espacio en donde la Universidad ha inmortalizado el nombre de una excelente profesora y compañera de trabajo», esbozó.
Destacó también, que Adriana logró trascender en muchas acciones: «trascender significa vencer el tiempo y hoy se ha vencido al tiempo. (…) El compromiso de la Universidad al igual que el de muchos de los que estamos acá, es no olvidarla jamás. Y esto es lo que podemos hacer desde acá para contribuir en este enorme dolor, pero también con una sonrisa y un cariño que solo se recuerda a las buenas personas. Adriana fue y será en nuestro corazón, una excelente persona siempre», concluyó.