El Dr. Osvaldo Andrés Barbosa, docente de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias (FICA), recibió el Premio al Mérito Geográfico por ser autor del capítulo referente a San Luis en el libro Manual de Buenas Prácticas para la Conservación del Suelo y del Agua escrito por más de 50 autores a nivel nacional y editado por la Fundación para la Educación, la Ciencia y la Cultura (FECIC) y el Centro para la Promoción de la Conservación del Suelo y del Agua (PROSA).
¿Por qué es necesario un manual para la conservación del suelo y del agua?
Nosotros previamente a este libro habíamos escrito otro titulado: El Deterioro del Suelo y del Ambiente en la Argentina. En ambos casos, entre miembros del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias (FICA) hicimos el capítulo que trata sobre San Luis.
En el primer libro, lo que podemos ver es toda la República Argentina y cuáles son los paisajes y los suelos que fueron degradados. En este segundo libro hablamos de las prácticas para conservarlo.
Este manual busca mitigar y recuperar los suelos degradados. En nuestro capítulo analizamos la provincia de San Luis. En pocas palabras, en el primer libro observamos cuánto de la superficie en Argentina estaba degradada y en el segundo, qué debemos hacer para conservar el suelo y el agua y mitigar los daños que vimos en el primero.
¿Cómo fue realizado este libro?
Estos dos (2) libros fueron emitidos y editados por la Fundación para la Educación, la Ciencia y la Cultura (FECIC) y el Centro para la Promoción de la Conservación del Suelo y del Agua (PROSA). Con el primer libro ganamos dos (2) galardones, en el 2016 el mismo que ganamos ahora con el segundo y en el 2017 el premio Andrés Aguilar Santelices In Memoriam, otorgado por la Sociedad Latinoamericana de la Ciencia del Suelo (SLCS) en el Congreso Latinoamericano de Ciencia del Suelo en Quito, Ecuador.
¿Qué políticas públicas se deberían aplicar en San Luis?
Esta problemática la provincia de San Luis la está trabajando bastante bien. Tiene leyes de conservación de suelos y ya venía operando desde antes de la escritura de este libro.
Actualmente, San Luis pertenece a la Comisión Provincial de Ciencias del Suelo que trata todos los problemas de la ley. Ahora haremos algunos cambios en los estatutos para que sea más ágil y así se pueda proteger mejor. Creo que la Provincia está actuando bien, pero es necesario hacer estos ajustes para que sea mejor la actividad de conservación del suelo a nivel provincial.
Generalmente, el problema proviene en que los productores no tienen conocimiento de la ley o no la llevan a cabo. Estos apuntes que le vamos a hacer, en donde el ingeniero agrónomo tiene un papel preponderante, va a permitir el actuar de mejor manera para que la conservación del suelo que tanto declaramos sea una realidad posible.
¿Qué procesos de degradación ambiental afectan a San Luis?
El principal problema que tenemos acá es que nuestro suelo tiene muy poco contenido de materia orgánica, por lo tanto, también tiene muy poca base estructural. Esa estructura apenas uno realiza una labor cultural, cualquiera sea ella, rápidamente se degrada a punto de alcanzar el deterioro.
El otro problema es que ese proceso degradativo avanza y produce la erosión eólica o hídrica. Nuestros suelos son muy frágiles, por lo que estamos propensos a que, ante cualquier laboreo, se produzcan estas erosiones que son graves, ya sea por agua o por viento. Una vez que se pierde un pastizal natural tarda muchos años en recuperarse. No es tan fácil.
¿Qué aconseja para conservar los suelos de San Luis?
Básicamente tener cubiertos los suelos. Si tenemos los suelos cubiertos estos procesos de degradación no van a seguir avanzando. En la medida que la cobertura vegetal esté presente, preferentemente con cultivo de tipo perenne como pastizales o alfalfa, se puede ir mejorando y alcanzando esos niveles de materia orgánica y de estructura de los bosques nativos.
Cada ambiente tiene un tipo de vegetación característico, se da especialmente por el tipo de suelo y por el tipo de clima. En San Luis hay varios tipos de ambientes, en el sur está el bosque donde podemos encontrar pastizales que se pueden aprovechar. También hay una parte de caldén y en el oeste, monte bajo de jarilla. Generalmente hay pastizal y debemos aprovecharlo, pero la agricultura fue avanzando en la Provincia y los pastizales se volvieron más escasos, eso trajo los problemas.
¿Para los productores qué recomienda?
Lo que recomiendo es un sistema mixto que varíe entre agricultura y ganadería para que haya una rotación de cultivo, no digo pastizal pero si puede ser forraje para generar la materia orgánica suficiente y mantener la estructura.
Sigue avanzando la siembra directa, por lo tanto, también, los procesos erosivos y el agua que arrastra elementos por debajo de la cobertura. La siembra directa no es la aconsejable porque muchas veces es peor el remedio que la enfermedad. En cambio, un sistema mixto tiene sus ventajas sobre todo en cuanto al clima, si realizás solo agricultura y te cae piedra, perdés todo. Hay que tener el suelo cubierto todo el año.
En cuanto al agua, las lluvias siguen siendo las mismas. A veces es más seco o menos seco pero las precipitaciones son las mismas. Lo que hay que pensar es que el agua que cae es una sola, tenemos que tratar de aprovecharla y conservarla. Si no la aprovechamos donde cae, se escurre y va a traer problemas.
Crédito
Leisa Gonzalez, estudiante de la carrera Licenciatura en Periodismo y becaria de la Secretaría de Comunicación Institucional de la UNSL.
Supervisora: periodista Fabiola Aranda.
Foto: gentileza Dr. Osvaldo Andrés Barbosa