Voces del Bosque Nativo: una propuesta para salvaguardar los saberes del territorio serrano de San Luis


A través de un trabajo interdisciplinario, docentes, investigadores, nodocentes, graduados/as y estudiantes de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) buscan fomentar la articulación de espacios de diálogos de saberes sobre el Bosque Nativo de diferentes territorios serranos de la provincia de San Luis. El trabajo está dirigido por la Dra. Ariana Posadaz, de la Facultad de Turismo y Urbanismo (FTU).

El objetivo es afianzar la construcción colaborativa de conocimientos, promoviendo así la salvaguarda del bosque nativo, como una alternativa sustentable para el desarrollo económico y social de las comunidades locales propiciando la conservación de la biodiversidad y el respeto a los saberes y prácticas comunitarias.

El proyecto está integrado por docentes, nodocentes, estudiantes, egresadas/os de la Facultad de Turismo y Urbanismo (FTU), de la Facultad de Ciencias Humanas (FCH) y de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales (FCFMyN), así como por colaboradores externos con inserción territorial e integrantes de la administración pública, como son el INTA, Parque Nacional Sierra de las Quijadas, Secretaría de Ambiente y Producción de la Municipalidad de la Villa de Merlo, entre otros organismos.

Con el mismo, se busca suscitar el diálogo, el intercambio y la construcción de conocimientos entre actores locales, organizaciones territoriales y la Universidad, como acciones fundamentales para la salvaguarda de saberes ancestrales, que promuevan el reconocimiento y puesta en valor de los productos del bosque nativo y fortalezcan las capacidades humanas para su uso sostenible.

«Esta propuesta, que busca contribuir a la conservación de la biodiversidad, el desarrollo socioeconómico local y la identificación de los vínculos entre naturaleza y cultura en esta región, resulta ser una continuidad de diversas acciones científicas, académicas, de extensión y vinculación territorial que este equipo viene desarrollado desde hace años», explicó la Directora.

Entre las actividades desarrolladas desde el equipo durante el año, se destacan la realización de un taller de registro audiovisual de relatos en movimiento, que busca instar a lo/as participantes a realizar registros y difusión colaborativa de saberes, la realización de un curso de extensión sobre la construcción de territorialidades.

Junto a esto, se plantea la realización del Conversatorio: Somos monte, que incluye seis (6) encuentros que se desarrollarán hasta el mes de agosto, entre ellos: Tulisquineros, actividad realizada en el mes de marzo, donde se elaboró arrope de tuna y se presentó la muestra Foto-Etnográfica Mirá ese monte. Vida y trabajo en Traslasierra. Las memorias de las ollas y las ollas con memoria, espacio realizado recientemente en el que se presentó el libro homónimo por su autor, se realizó una muestra de productos alimenticios elaborados localmente y una recopilación de recetas regionales y reproducción en vivo de algunas de ellas. Las yuyeras en las voces de mujeres que se dedican a este oficio. En este espacio se realizará la presentación del libro El murmullo de las plantas, por sus autores/as.

Como cuarta actividad se realizará: Hilados y cueros, donde se rescatarán los saberes de teñir, hilar y curtir artesanalmente con productos del bosque nativo. Aprovisionamiento de leña, trabajos y artesanías con madera y tejidos vegetales, espacio en el que se conocerán las técnicas y saberes asociados al uso del fuego y la realización de productos artesanales. Finalmente, Arte y construcción con arcillas y piedras actividad en la que se reconocerá la utilización de recursos inorgánicos del suelo y el paisaje para actividades artísticas con raíces territoriales.

Otra de las actividades incluye la realización del taller participativo: Territorios vivos. Activaciones lúdico-artísticas a partir de los conocimientos comunitarios de plantas, con dos (2) instancias: un espacio de circulación de saberes, usos y prácticas tradicionales sobre las plantas del bosque nativo serrano a partir de los archivos del folklore y una activación artística comunitaria a partir de las memorias locales sobre el territorio. Actividad que se realizará en el mes de octubre.

Además, habrá una celebración de finalización del ciclo, con eje en la puesta en valor de la tradición del encuentro comunitario de las fiestas populares, mingas y ferias de intercambio, prevista para el mes de noviembre.

«A partir del desarrollo del proyecto esperamos poder fortalecer y afianzar la mirada respecto que las personas somos también parte del entramado valioso del monte nativo, reconocerlo como nuestra casa, nuestra fuente de aprovisionamiento, pero también de cultura, historia, espiritualidad y como el sostén de innumerables bienes y servicios que sustentan nuestra calidad de vida», explicó Posadaz. A partir de allí, se reconocerá como vectores de la salvaguarda y la conservación de la biodiversidad y la diversidad biocultural. Al finalizar, desde el equipo buscarán contar con un corpus de registros audiovisuales de producción colectiva y una muestra foto-etnográfica del proyecto, disponible para itinerar.

«El financiamiento que la UNSL realiza a través del PITSA para proyectos de esta naturaleza resulta muy importante ya que permite generar lazos con la comunidad y posicionar la Institución como un actor social comprometido con el territorio donde se encuentra», comentó la Directora, destacando que además propicia la participación ya que las actividades serán abiertas a la sociedad y de carácter gratuito y pone en valor voces que son invisibilizadas en el mundo actual.

Por otro lado, desde el equipo sostienen que la propuesta de generar proyectos con múltiples unidades académicas, diversos claustros, actores de la administración pública, participación de referentes sociales y organizaciones territoriales, y que además vinculan las funciones de investigación, docencia y extensión, genera un espacio propicio para el encuentro de miradas, prácticas, saberes y enfoques que redundan en importantes aprendizajes para todo/as quienes participan.

Foto: cortesía Ana Orellano y Glenda María Irene Panont

X