Luego de una primera instancia teórica, Carina D’Ágata de la biblioteca universitaria Antonio Esteban Agüero, avanza sobre la parte técnica en gestión de estas áreas con el personal de la biblioteca y archivo disidente Carlos Jáuregui del Espacio WEYE, que se especializa en materia de diversidad e inclusión.
A partir de un trabajo conjunto entre la Universidad y la Secretaría de Estado de la Mujer, Diversidad e Igualdad, se firmó una nueva Acta Complementaria, que busca contribuir al mejoramiento de la gestión bibliotecaria, labor iniciada a mediados de mayo del año pasado, previo a la inauguración del centro de documentación disidente, en el Día Internacional del Orgullo.
El puntapié inicial de estas capacitaciones surgió por iniciativa de Maia López, responsable de WEYE, luego de recibir una donación de material bibliográfico por parte de la UNSL, entrega primaria que incluía libros de historia, geografía, poesía, y revistas científicas de la editorial universitaria. Esto generó la necesidad de comenzar a instruirse en el funcionamiento del espacio y los procedimientos de clasificación del contenido y temáticas afines.
En este sentido, Diana Garraza, colaboradora de Vicerrectorado, contó: «nos pusimos al servicio de la Secretaría con una primera capacitación teórica a nivel general de las normas de conformación de las bibliotecas, establecidas por la Organización Internacional de Normalización (ISO)». A su vez, señaló que la segunda Acta Complementaria se trata de una formación técnica y sellado de libros, la cual ya se está llevando adelante desde junio, mediante un (1) encuentro semanal, de dos (2) horas, y tendrá una duración de entre tres (3) y cuatro (4) meses.
También agregó que «la idea es poder vincularnos entre ambas instituciones y, una vez finalizado el curso, poner en funcionamiento la biblioteca de la diversidad para la posterior impresión de dos (2) banners con sus correspondientes códigos QR, que direccionen a su reservorio, de modo que toda la gente que vaya a nuestra biblioteca universitaria, pueda visualizar qué libros tienen a disposición en esta temática».
La técnica bibliotecaria Carina D’Ágata, encargada del dictado de las clases, destacó el empeño y compromiso del estudiantado, quienes están repasando los contenidos teóricos abordados el año pasado, al tiempo que desarrollan la parte técnica de inventariado, selección, adquisición, adelantando el sellado de libros. Luego, continuarán con clasificación, catalogación e indización para hacer un catálogo online, que el público en general pueda consultar, y así ya poder empezar con los préstamos, poniendo en práctica lo aprendido sobre la preservación y conservación de libros.
Además, mencionó que recientemente han participado en la oferta educativa para la escuela TransFormar y en diversas actividades de extensión como son la Feria Provincial del Libro y charlas y talleres que permiten visibilizar el material bibliográfico.
Por su parte, Maia López, transmitió su felicidad por el vínculo con la Universidad y por las acciones en beneficio de la comunidad, con la posibilidad de acceder a una formación profesional e integral. También, manifestó su deseo de ya querer abrir las puertas de la biblioteca especializada en materia de diversidad e inclusión, pero entendiendo la importancia de todo el proceso de preparación.
Por último, Diana Garraza recalcó que a cada una de las capacitaciones les corresponde una Resolución Rectoral de acreditación de conocimiento, ya que están certificadas y avaladas por la UNSL. Y reflexionó sobre «la entrega de certificados a personas que por ahí veían la universidad como un lugar lejano, y que sin embargo, ahora la Universidad sale de sus puertas para meterse en el territorio de la diversidad».
Crédito de nota: Gwyneth-Anne Maiale Lopez, estudiante de la Licenciatura en Periodismo. Becaria en Prensa Institucional de la UNSL.