A principios de marzo se realizó el acto de apertura de las Jornadas Nosotras Movemos el Mundo. En el acto, se homenajearon a seis (6) organizaciones de la sociedad civil que mantienen vigente la lucha por la Memoria, la Verdad y la Justicia. Una de ellas, integrada por la Esp. Ana María Garraza, coordinadora del espacio de Derechos Humanos de la UNSL.
El evento contó con la presencia de Alberto Fernández, presidente de la Nación y de titulares de los Ministerios de Cultura, y de Mujeres, Género y Diversidad. Este año el objetivo de la Jornada fue reflexionar sobre las conquistas logradas en estos 40 años de democracia en Argentina y debatir sobre los desafíos que todavía existen para consolidarla con más participación, más igualdad de derechos y más federalismo.
La distinción fue recibida por mujeres de cada rincón del país que supieron sembrar memoria e identidad colectiva. Las homenajeadas fueron: Ana María Garraza, María Beatriz Horrac y Estela Cereseto, de La Colectiva de Ex Presas Políticas; Lidia Frank y Margarita Cruz, integrantes de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos; Lucia Extremera, Virginia Franco y Natalia Naveira, de H.I.J.O.S.; Carmen Arias y Josefa Fiore, de la Asociación Madres de Plaza de Mayo; Clara Weinstein y María Adela Gard Pérez de Antokoletz, de Madres Línea Fundadora; y Victoria Montenegro, por Abuelas de Plaza de Mayo.
Sobre la distinción, la Esp. Ana María Garraza expresó que la invitación a participar en el acto inaugural del Programa Nosotras Movemos el Mundo le llegó a distintas ex presas políticas que habían viajado a la Feria Internacional de La Habana (Cuba) a presentar el libro Nosotras en Libertad.
«Este reconocimiento se hizo a las mujeres que denominaron pioneras de la democracia, es decir aquellas que estamos nucleadas en diferentes organizaciones y que desde hace mucho tiempo no solamente hemos resistido a la dictadura, sino que hemos seguido participando de distintas maneras en espacios para sostener, mejorar y profundizar esta democracia», dijo.
Al mismo tiempo, Garraza afirma que como sobrevivientes de la noche trágica de la dictadura cívico militar, como colectiva de ex presas políticas nucleadas, les parece muy importante este reconocimiento, porque en ese mismo acto se homenajeó a las Madres de Plaza de Mayo, a Abuelas, a ex detenidos/as desaparecidos/as e hijos/as. «El rol de los sobrevivientes ha sido muy importante durante la democracia, por haber sido vitales y fundamentales en los juicios por delitos de lesa humanidad (…) hemos sido la voz de los/as que no podían tenerla, para que se pueda determinar y comprobar las responsabilidades penales de la dictadura en todo el país», dijo, resaltando además el deber para con la sociedad de testimoniar los hechos y garantizar que esto no vuelva a ocurrir.
En este sentido, y haciendo referencia a su rol actual como Coordinadora de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL), sostuvo que esto implica asumir una serie de políticas que la Universidad se ha propuesto en esta gestión encabezada por el rector C.P.N. Víctor Moriñigo. Uno de estos ejes, es la presentación el próximo 24 de marzo del libro Nunca Más en la Universidad, que fue iniciado en 1984 y que a casi 40 años no había podido ser publicado.
Junto a esto, se trabajará en la Universidad en la curricularización de los Derechos Humanos en todas las carreras, con el objetivo de formar ciudadanos/as democráticos/as con pensamientos críticos y con conocimiento de la historia. «La historia no es pasado, nos va determinando en cómo actuamos en el presente personal y socialmente (…) estas tareas hablan de algún modo del compromiso que tiene, ha tenido y seguirá teniendo nuestra Institución para con el sistema democrático y con el Nunca Más», finalizó.
Fuente consultada: Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación
Fotos: gentileza Ana María Garraza