Se trata de uno de los Laboratorios de Electrónica de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas y Naturales (FCFMyN) que abrió sus puertas en el mes de junio y hasta noviembre para el dictado de un curso destinado a estudiantes de los últimos años del secundario enfocado en la educación en STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemática). Esto representa un verdadero desafío para los nativos digitales, quienes crecen inmersos en la tecnología del siglo XXI y se sienten cómodos utilizándola en su vida diaria aunque, en general, desconocen cómo funcionan las herramientas tecnológicas que usan diariamente.
La ingeniera electrónica Ivana Trento, responsable de la actividad, explicó que Ciencia en Acción es una oportunidad de inserción a los Laboratorios científicos de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL). Durante las clases se combinan pequeñas dosis de teoría con gran cantidad de práctica con el objetivo claro que los/as estudiantes puedan explorar de forma interactiva, en base a la experimentación, la conexión entre diferentes disciplinas científicas y tecnológicas.
Entre las actividades los/as jóvenes van a aprender a soldar con estaño y a medir con multímetro digital. Aprenderán a simular circuitos eléctricos y a construirlos. «Por ejemplo, en la primera clase construyeron una batería eléctrica con papas que generará suficiente energía como para alimentar una calculadora. Luego seguiremos avanzando, resolviendo acertijos y distintos desafíos de programación, hasta llegar a manejar sensores, actuadores y placas de desarrollo tipo Arduino para implementar proyectos de robótica. También les enseñaremos a crear aplicaciones para dispositivos móviles que puedan vincularse con sus proyectos de robótica a través de Bluetooth», explicó Ivana.

También agregó que en cuanto al mundo de la impresión 3D, los/as jóvenes aprenderán a modificar y a diseñar sus propios modelos tridimensionales, que luego se imprimirán para aprender las técnicas de manejo de la impresora 3D, como la regulación de la temperatura y la velocidad según el diseño y el material de impresión utilizado. «Enseñaremos conceptos sobre Inteligencia Artificial (IA) y su uso responsable para potenciar el aprendizaje. La idea es finalizar el curso con un proyecto de Aprendizaje Automático vinculado con Visión Artificial», contó la ingeniera.
Para todas las actividades se utiliza software libre y/o gratuito, como Tinkercad, App Inventor, IDE Arduino, entre otros. A todas estas actividades, se le suma el desarrollo de habilidades blandas de los/as adolescentes, como por ejemplo el trabajo en equipo, la creatividad, el pensamiento crítico y la resolución de problemas.
«Es todo un desafío plantearles actividades que llamen su atención y que puedan despertar su vocación científica. Hemos buscado gran cantidad de material y preparamos experiencias divertidas e innovadoras para cada clase, de manera de ir cubriendo los temas sobre los que vamos a trabajar en el curso», resaltó Trento y añadió que muchos jóvenes hoy en día manejan aplicaciones y dispositivos, pero carecen de conocimientos sobre los principios que los impulsan. Sin una educación adecuada, no solo quedan limitados al consumo de tecnología, sino que también pierden la oportunidad de convertirse en creadores de soluciones innovadoras.
Fomentar el entendimiento de conceptos sobre electricidad, programación, robótica, diseño de modelos 3D e IA permite adquirir habilidades técnicas para contribuir activamente a la transformación digital de la sociedad. La capacitación en STEM durante el cursado de la secundaria también fomenta el desarrollo de vocaciones científicas, mostrándoles a los/as jóvenes distintos campos de estudio y acercándolos a la universidad de manera temprana.
Fotos: gentileza Ing. Ivana Trento