El Laboratorio de Sólidos Porosos de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) se inauguró oficialmente en 2016 y, además de trabajar esencialmente en estudios sobre materiales porosos, se ha convertido en una referencia del continente en una técnica particular de caracterización, denominada adsorción. El Dr. Karim Sapag, director e impulsor del Laboratorio, nos cuenta sobre la historia del espacio y las temáticas que se trabajan.
Los materiales porosos son huecos pequeños que tienen los sólidos, donde pueden provocarse reacciones entre moléculas de manera más efectiva que al aire libre. «Permite experimentar con mayor calidad y facilidad las interacciones entre diversos compuestos, los confinas dentro del poro y podes crear, almacenar o incluso retener ciertos productos allí», explica Sapag. Un filtro de agua, por ejemplo, puede trabajar con material porosos, donde se atraen y retienen las moléculas contaminantes del agua.
Además, el Laboratorio se destaca por trabajar con la adsorción, una técnica particular de caracterización de sustancias o materiales, que supone una faceta de aplicación experimental. De hecho, el Laboratorio es reconocida internacionalmente por el trabajo que han hecho utilizando esta técnica, y el Dr. Karim Sapag frecuentemente da charlas en diferentes instituciones académicas al respecto.
Desde 2016 hasta la actualidad, el Laboratorio se encuentra en el segundo piso del Bloque II, con un amplio arsenal de equipamientos, y alrededor de 12 personas abocadas al trabajo allí, entre investigadores/as, técnicos/as y becarios/as. Sin embargo, la historia del Laboratorio comienza mucho antes y no siempre fue así. Luego de haber aprendido sobre la adsorción en España, el Dr. Sapag vuelve al país y siente la necesidad de continuar con el trabajo experimental y de aplicación sobre materiales porosos, algo que en esa época no era habitual. «Se trabajaba casi de manera total con simulaciones, que es importante, pero era necesario un espacio para lo experimental», recuerda Sapag.
Sin ser oficial, el primer lugar que podría considerarse como Laboratorio de Solidos Porosos se ubicaba en el subsuelo del edificio de Chacabuco y Pedernera, en un espacio que no contenía las condiciones de seguridad óptimas para el trabajo a realizarse. «Tuve que instruirme en seguridad de higiene, solemos trabajar con sustancias tóxicas y podía ser peligroso». Sin embargo, hasta este momento Sapag era la única persona que integraba el Laboratorio, más allá de contar con el apoyo de sus colegas.
El 2000 fue un punto de quiebre importante: el Laboratorio adquiere su primer equipamiento importante (un sortómetro de gases) y su primer becario. A partir de allí, y durante los próximos años, hubo una importante tarea de reclutamiento, tanto de becarios de toda Latinoamérica, como también de herramientas de trabajo mediante proyectos junto a otras instituciones internacionales, que permitían ampliar el potencial del Laboratorio. Es durante este tiempo que Sapag se inclina por trabajar en torno a los sólidos porosos, principalmente a través de la técnica de adsorción.
En la actualidad, el Laboratorio sigue tres (3) líneas de investigación bien marcadas: en energía, ya sea por almacenamiento de hidrogeno y metano, o producción de hidrocarburos líquidos. En medioambiente, por ejemplo, mediante la retención de moléculas de arsénico en el agua, para descontaminar la misma. También en salud, por ejemplo, introduciendo un medicamento dentro de cierto material poroso que permite lo que se denomina “liberación controlada” y ayuda a optimizar la eficiencia del medicamento.
El Laboratorio también realiza servicios permanentemente, al ser referentes en la técnica de caracterización, muchos laboratorios, empresas o centros de investigación recurren a ellos para caracterización de materiales o sustancias.
Además, el grupo ha adquirido una planta de nitrógeno líquido, que tiene múltiples aplicaciones en diversas ramas de la ciencia. El Laboratorio provee a otras áreas de nitrógeno líquido, con un precio interno acordado que ayuda a mantener el espacio. «Es clave en la ciencia compartir, tanto equipamientos como información o conocimientos, es la única manera de sacar un provecho máximo de nuestro potencial (…) Una de las ventajas que tiene ser referentes nacionales en términos de caracterización de materiales porosos es la posibilidad de realizar múltiples proyectos y mantener conexiones con otras instituciones importantes, tanto nacionales como internacionales», destaca el doctor Sapag.
Crédito
Nota producto de actividades de prácticas pre profesionales de alumno de la carrera Licenciatura en Periodismo en Prensa Institucional de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL).
Alumno: Tomás Álvarez.
Supervisora: periodista Fabiola Aranda.
Fotos: Ramiro Ribas (Prensa UNSL).
Dato
Conocé el Laboratorio desde nuestras redes sociales. Allí se publicará el álbum completo de fotografías.
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