La reunión del Equipo Técnico Interdisciplinario (ETI) con la Dirección General de Asesoría Jurídica de la Universidad, surge ante la necesidad de coordinar pautas y criterios de trabajo e interpretación jurídica del Protocolo Institucional de Intervención ante denuncias por situaciones de Violencia de Género, Identidad de Género y Discriminación, entre otros aspectos.
Del encuentro participaron el secretario General, Dr. Raúl Gil, el equipo de profesionales de Asesoría Jurídica con asiento en Rectorado, el Equipo Técnico Interdisciplinario (ETI) a cargo del Protocolo de Género y el secretario de Comunicación Institucional y representante de género por la UNSL, Dr. Claudio Lobo.
En la reunión se abordaron aspectos vinculados a los circuitos y procedimientos en el tratamiento de casos dado que algunos ya se encuentran en proceso y a los cuales se les debe dar una respuesta en el marco de la nueva normativa.
Asimismo se planteó la necesidad de coordinar una próxima reunión ampliada con todos los equipos profesionales de las diferentes áreas de Jurídica de la Universidad con el fin de poder establecer criterios generales de articulación de trabajo. «El desafío que nos hemos planteado es la generación de una cultura institucional libre de violencia y discriminación desde una perspectiva de género que apunte a un cuidado integral de las personas», expresó el Dr. Lobo.
El Protocolo establece un procedimiento que debe ser interpretado conforme al sistema normativo imperante que lo excede y ese sistema no solo incluye lo que son las normas propias de actuación de la UNSL, sino que incluye una serie de tratados y convenciones internacionales específicamente relativos a las cuestiones de violencia y de discriminación que trata el Protocolo y de alguna manera debe coordinarse la interpretación porque no es simple de la lectura normativa llegar a una solución que atienda integralmente tanto los principios que se deben contemplar de la normativa superior, como de la normativa mas procedimental de la Universidad.
«La idea fue coordinar criterios y pautas de interpretación del Protocolo a fin de hacer un análisis sistemático de la normativa vigente en la Universidad y poder aplicar lo que es el Protocolo atendiendo los principios de celeridad y de confidencialidad que requiere cualquier hecho por el que se active la aplicación del Protocolo», explicó Yamile Alume, abogada del ETI. En la reunión se acordó coordinar esfuerzos, principalmente en lo que respecta al procedimiento legal, y comenzar a realizar una buena política de género en la Universidad que sea consistente y concordante con la normativa general de la Institución.
Cuando el ETI toma intervención en alguna situación que eventualmente necesite de la aplicación del Protocolo, sigue una serie de instancias relacionadas a la contención de las personas, aportar información, orientar, asesorar cómo abordar y transitar lo que sería una denuncia por violencia de este tipo. En general, el Protocolo no tiene un espíritu punitivo, sin embargo hay instancias en las que la aplicación de la sanción es obligatoria y necesaria y que ya no compete al ETI, y en ese caso es donde interviene Asesoría Jurídica, que es quien tiene a cargo los sumarios y lo que administrativamente corresponde.
«Ahí hay un trabajo de articulación que es necesario y urgente (…) Se trata de comenzar a trabajar mancomunadamente para ver cómo administrativa y legalmente se eviten nulidades ante denuncias o consultas en las que el ETI haya tomado intervención y requieran de un sumario», explicó Raúl Gil.
Por un lado se trata de cuidar el aspecto legal y por otro, de evitar la revictimización de las personas que han realizado la denuncia, en tanto de no exponer identidades, señalarlas como denunciantes, entre otras. «Me parece que es muy importante que se siga trabajando (…) Estas instancias son muy útiles, ojala la podamos repetir en otros espacios para que el ETI pueda trabajar de la forma mas eficiente posible», dijo el Secretario General.
Desde el ETI se está trabajando en diferentes proyectos atendiendo a las demandas que se han ido presentando. Han habido múltiples consultas. Se han planteado diversas situaciones que no siempre tienen que ver con la violencia de género o discriminación, pero el Equipo ha intervenido y pensado diferentes estrategias de prevención.
«Institucionalmente es mucho trabajo, este Equipo se traduce en un montón de instancias de propuestas, de proyectos, de agenda que tienen que ver con lo que hace a la capacitación y sensibilización más allá de la intervención en la urgencia que es lo que estamos haciendo», remarcó Candela Manrique, trabajadora social del ETI.
Por su parte, la psicóloga del Equipo, Alejandra Ortiz Alarcón, argumentó la necesidad de articulación desde el ETI con toda la comunidad universitaria. «Esperamos esta predisposición articular desde diferentes instancias de la Universidad para poder hacer realmente un buen trabajo a nivel profundo y estructural dentro de la Institución en políticas de género».